EL PERIODISMO EN SANTA FE
Los primeros datos fehacientes de una publicación en nuestra ciudad datan del 14 de noviembre de 1830, cuando se disuelve la Convención Nacional y queda la imprenta en Santa Fe. Así surge la Imprenta Oficial y el periódico “El Federal”.

Existen datos de una impresión anterior de manos de un General chileno llamado José Miguel Carrera, en 1820, pero los informes no son muy precisos.“El Federal” cubrió hechos de gran relevancia para nuestra historia: los acontecimientos previos al tratado del 4 de enero de 1831, la firma del Pacto, la guerra contra los unitarios y la captura del General Paz.Una década después nace “El Libertador”, una publicación de carácter “unitaria” que se inició por orden del Gral. Lavalle durante la invasión a Santa Fe. El 20 de junio de 1845 ve la luz “El Eco Santafesino”, cuyo redactor fue José Ruperto Pérez. Por su parte, “El voto Santafesino”, fundado el 27 de Marzo de 1847, existió hasta 1849.
Marcos Sastre fue el responsable de la dirección y redacción de “El Sud Americano” cuyo primer número fue lanzado el 16 de junio de 1849, y “El Album Santafesino”, de setiembre de 1850, fue redactado por el Dr. Severo González y Pedro Echagüe.
Ya funcionando el Congreso Constituyente en 1853, se escribe un periódico llamado “La Voz de la Nación Argentina”, que aparece el 1 de enero de ese año y es publicado en la Imprenta del Estado. Su último número se redacta en abril del ‘53.
Cuando ejercía el cargo de Gobernador Juan Pablo López, a comienzos de 1857, se nombra editor responsable a Juan Burki de “El Chaco” un periódico nacido para reforzar las ideas de la Confederación. Pero Burki renuncia pocas semanas después. Para reemplazar a “El Chaco” surge “El Pueblo”, que duraría nada más que un año.
Así se irían abriendo y cerrando distintas redacciones y periódicos como “El Patriota” en 1858; “La Fraternidad” en 1860, “La Verdad” en 1864, “El Fénix” en 1872; “La Bandera Nacional” en1872, “El Eco del Pueblo” en 1872; “La Defensa Católica” en 1877; “El Santafesino” en 1878; “Nueva Epoca” en 1886, hasta 1937; “La Revolución” en 1888; “Unión Cívica” en 1890; “Unión Provincial” 1893; “El Tribuno” en 1895.
Ya en nuestro siglo aparece “La Opinión” en 1901, “El Heraldo” 1906; “La Democracia” en 1911, al igual que “Santa Fe” el 1 de Febrero de 1912, éste fue el primero en utilizar en la zona fotograbados y apareció hasta 1934. El 2 mayo de 1914 comienza a editarse “El Imparcial”, y un año después, “La Palabra” quien tenía como primer Director a Alcides Greca, le sigue Alejandro Gruning Rosas y luego, Salvador Caputto.
En 1918, más precisamente el 7 de agosto, el mismo Salvador Caputto funda “El Litoral”, que funcionaba en San Martín 781. Posteriormente se incorpora en carácter de administrador, Pedro Víttori.
Y podemos seguir nombrando al diario “La Provincia” el 15 de Junio de 1925, “El Orden” en 1927; “El Debate” el 15 de Octubre de 1927; “El Sol” en 1929; “El Nacional” en 1930; “El Tribuno” en 1930; “La mañana de Santa Fe” en 1937; “Norte” en 1939; “Santa Fe de Hoy” en 1942; “El Interior” en 1957; y “Nuevo Diario” en 1968 que estaba bajo la dirección de Alfredo Sahd y siendo su propietario Marcos Bobbio.
En los últimos años aparecieron, en los '80, "Noticias" y "El Federal". En los '90 "El Matutino", un desprendimiento de "El Litoral"; y hacia 1997 "La Provincia".
UN DIARIO MUY PARTICULAR, "NUEVA EPOCA"
Tras la victoria electoral del Dr. José Gálvez, del partido autonomista, el clima político de la provincia era incierto y la oposición se tornaba cada día más fuerte. Es por esa razón, entre otras, que el nuevo mandatario toma la iniciativa de que se funde un diario que sostenga los ideales de su partido.

Para tal fin se designa a David Peña, destacado hombre de letras, como Director del periódico que se llamaría “Nueva Epoca”, siendo fundado el 20 de mayo de 1886.
Al poco tiempo comenzarían los contrapuntos con la oposición, que también crearía su propia redacción. Contra el primer periódico que tiene que emprenderla es “La Revolución”, redactado por el Dr. Gerónimo Cello y luego contra “Unión Cívica”, que dirigen Carlos y José Gómez.
La primera campaña comienza enseguida, con la candidatura oficial del doctor Juan Cafferata como Gobernador. En su contra los “constitucionalistas” sostienen a Don José Bernardo Iturraspe. Triunfa Cafferata, pero los radicales se alzan en julio de 1893 y asumen el poder, hecho que se conoció como el “gobierno de los 21 días”.
Desde las páginas de “Nueva Epoca” se ataca con dureza y los radicales toman presos a numerosos miembros de la Legislatura como forma de amedrentar a la oposición.
Pero David Peña no se rinde y también es encarcelado. Al día siguiente el periódico denunciaba el atentado y haciendo “responsables de la violencia, vejaciones y atropellos inauditos que se están cometiendo, a Mariano Candioti (Gobernador provisorio), Agustín Landó (vicegobernador), Joaquín Lejarza (Ministro de Hacienda), Lisandro de la Torre (Ministro de Justicia) y a Martín Rodríguez Galisteo (Ministro de Gobierno).
Al otro día las puertas de “Nueva Epoca” aparecen cerradas, mientras se anunciaba al público que su “autoclausuramiento” obedecía a la “mazorcada” que tuvo lugar la noche del 7 de agosto de 1893.
Transcurrido el tiempo, los ánimos se aplacaron y se logró la reconciliación, pero David Peña continuaba con la lucha.
Atentos al nuevo cambio de gobierno, la oposición funda un diario de batalla para sostener, nuevamente, la candidatura de José Bernardo Iturraspe; y nombran como Director a Don Domingo Silva; este periódico se llamaría “Unión Provincial”.
Tanto David Peña, como Domingo Silva, sostuvieron brillantes discusiones de distintos aspectos desde sus redacciones. Pero un día, cansado de la política, el Director de “Nueva Epoca”, se marchó hacia Buenos Aires.
Entre las personas que estuvieron al frente del periódico podemos citar a: Ramón Lassaga, José Ignacio Llobet, Juan Arzeno, Lorenzo Anadón, Ramón Doldán, Gustavo Martínez Zuviría, Mateo Booz, Manuel del Sastre y Carlos Carranza, entre otros.
Allí, en la vieja redacción de calle Comercio y Entre Ríos (hoy, San Martín y Moreno), se formaron muchos jóvenes periodistas que dejaron escrita en sus páginas la historia de la ciudad, la provincia y de la Nación.
José Rafael López Rosas



DIARIO EL LITORAL

Aviso que anunciaba la salida del nuevo diario “El Litoral”.
En 1918, Don Salvador Caputto funda el diario representativo de la ciudad de Santa Fe, El Litoral. Su primer ejemplar fue impreso el 7 de agosto. Dos años más tarde se suma como administrador Don Pedro Víttori y así queda formado el grupo empresarial.

Su primer lugar de trabajo, y hasta 1929, se montó en una casa en calle San Martín, entre Juan de Garay y Corrientes. En ese año se mudan a una pequeña vivienda ubicada en San Martín 2653.
En ese mismo lugar, se decidió la construcción del edificio de planta baja y tres pisos, entre los años 1942 y 1943, donde se alojarían las oficinas administrativas, redacción, sección de atención al público, archivos, sala de impresión, etc. En la vidriera que daba sobre la peatonal se colocaban carteles con las noticias de último momento a modo de adelanto del contenido del periódico.
La idea original se plasmó pensando en que este nuevo edificio podría satisfacer todas la necesidades de trabajo en forma definitiva, pero el 13 de mayo de 1980 se trasladan a su actual ubicación de calle 25 de Mayo 3635, donde cuentan con todas las comodidades que necesitaban debido a su gran crecimiento.
LUIS DI FILIPPO
Luis Di Filippo nació en Rosario el 6 de marzo de 1902, y desde joven comienza a trabajar en el periodismo de aquella ciudad, así es que a los 20 años ingresa en “La Capital” y de allí en más nunca abandonaría esta profesión.
Durante el gobierno del Dr. Pedro Gómez Cello (1928 – 1930), ocupa el cargo de Secretario del Departamento Provincial del Trabajo y se traslada a nuestra ciudad, donde comienza a escribir en el diario “La Provincia” y más tarde en “El Litoral”.
También se desempeñó como Secretario de la Jefatura de Policía, y emprende el camino de la docencia, en el ex Colegio Nacional Simón de Iriondo.
Fue socio fundador de la Asociación Santafesina de Escritores y fundador de la “Gaceta Literaria de Santa Fe” y “Punto y Aparte”.
Entre 1962 y 1977 se radica en Mar del Plata y Buenos Aires, donde colabora con los diarios “La Nación” y “Clarín”. Todos sus artículos están teñidos de un sutil humor y escepticismo, al igual que sus libros, entre los que podemos mencionar: “Cinco semblanzas”, “La política y su máscara”, “Federalismo y libertad”, “Agonía de la Razón”.
Durante la intendencia del Ing. Jorge Obeid, y mediante una iniciativa de vecinos y de tradicionales instituciones, se le otorga el honoroso título de ciudadano ilustre de la ciudad de Santa Fe.
Falleció el 12 de julio de 1997, en nuestra ciudad.
LAS RADIOS EN SANTA FE.
Tuvo a su pionero en Don Alfredo Roca Soler, quien desde el altillo de su casa comercial de San Gerónimo y 1° Junta comienza a emitir con la señal distintiva F1, la que luego fue cambiada por la señal LV6; hasta el 6 de abril del ‘53, que recibió la identificación LT 9.

A principios de los ‘30 comienza a emitir desde una casa en 9 de Julio y Tucumán para luego, desde 1940, hacerlo en una casona contigua al Cine Colón, desde donde se transmitían audiciones en vivo, como las recordadas “Candilejas del aire”.

En 1958 el consorcio Bobbio, Boisa y Savio gana la licitación e instala la emisora en San Martín 2685. En el ‘69, una nueva licitación se la adjudica a Ondafe S.A. con el Dr. Isaías Naput como primer Presidente del Directorio.

Las emisoras comenzaron desde el nuevo edificio de 4 de Enero 2143, el 1° de mayo de 1970, pero ya no como LT 9 Radio Santa Fe, sino como LT 9 Radio Brigadier Estanislao López.
Las siguientes son fotos de los comienzos de la emisora en 1924 y el comentario que, en 1932, realizaba “El Litoral” sobre LT 9 y LT 10.




LT 10 RADIO UNIVERSIDAD
El 28 de julio de 1928, el Honorable Consejo Superior de la Universidad Nacional del Litoral decidió la creación del Instituto Social de la casa de estudios, con la función de establecer el contacto entre la Universidad y el Pueblo, sirviendo a sus intereses, reflejando sus aspiraciones y comprendiendo sus problemas vitales. El Rector en ejercicio, Doctor Rafael Araya, consignó en los fundamentos de su creación “las exigencias cada día mayores de la sociedad, que demanda la más amplia difusión de la cultura superior, para ponerse en contacto con las asombrosas conquistas de la civilización moderna”.

Para Araya se trataba de “imprimir a la Universidad una dirección ideológica concordante con las necesidades y los ideales del medio social en que funciona”. Por eso, el Instituto Social nació constituido por la Universidad Popular, el Museo Social, el Departamento de Extensión Universitaria y LT 10, Radio Universidad.

Puede decirse, entonces, que LT 10 radio Universidad nació con el desafío de cumplir con aquellas funciones y objetivos de lo que hoy se denomina “Lenguaje radial” o “comunicación radial”.
LT 10 fue habilitada el 18 de agosto de 1931 con un acto público en la Facultad de Química Indus-trial y Agrícola, en cuya terraza funcionaba la estación. Se transmitía todos los días hábiles, de 18.30 a 20 hs, con información universitaria, informes de tipo agrícolo-ganadero, divulgación de conocimientos útiles, arte y literatura, etc.

El 22 de agosto de 1935, debido a las malas condiciones se suspenden las actividades y sólo ocasionalmente se la utiliza en la transmisión de actos y conferencias.

El 3 de junio de 1936, reanuda sus actividades en forma experimental con nuevos equipos, mayor potencia y adecuación de sus instalaciones, además irradia con una nueva frecuencia de 1300 Kc/S. El 18 de junio de 1936 se reinician las transmisiones ordinarias.
Al inaugurarse este segundo período, el Rector Josué Gollán y el Director de Extensión Universitaria, José Babini, se refieren a la importancia de contar con una emisora universitaria y a los objetivos establecidos por la resolución original.
A partir de ese momento la emisora adquirió un perfil que se mantendrá y ampliará a lo largo de los años:
– Captación de un segmento específico de la audiencia:
A) Sector alto y medio de la población, intelectuales, artistas, etc.
B) Un lenguaje radial distintivo en función de dicha audiencia.
– Una programación dirigida a ampliar dicha franja de público sin alterar su finalidad y perfil.
Pueden distinguirse desde entonces los siguientes períodos:
1- Un primer período en el que la radio transmite cuatro horas diarias en horario vespertino y en el que la programación incluye música clásica, folklore, información universitaria, charlas, conferencias y comentarios.
2- Un segundo período en el que la radio amplía su horario de transmisión que incluye en su programación comentarios de libros, teatro leído y boletines informativos. Durante este período amplía su potencia, adquiriendo una presencia regional.
3- Un tercer período en el que gestiona y obtiene autorización para irradiar publicidad comercial bajo un régimen de excepción.
En el año 1956 se inició la transformación de LT 10 para estar a tono con los adelantos técnicos de la radiofonía, modificando su programación en busca de una mayor audiencia.
Esta significativa transformación culmina el 21 de setiembre de 1961, ocasión en que sale al aire con un nuevo equipo de 1,5 Kws. Con antena en su frecuencia de 1430 Kws y planta transmisora con antena de ¼ de onda ubicada en el Campo de Deportes de la Universidad en el Barrio Don Bosco. Ese 21 de setiembre están en la radio Raúl Forzano, Elsa Ramos de Villar, Duilia Ciuffo, Jaime Víctor Tepper, Pedro Oscar Roteta, José Alberto Guastavino, Enrique Rodolfo Muttis, entre otros.
En el año 1964, la Secretaría de Comunicaciones de la Nación autorizó la difusión de publicidad comercial con la finalidad de ayudar al mantenimiento y crecimiento de la emisora.
En marzo de 1966 LT 10 aumentó su potencia a 10 Kws en horario diurno y media potencia en el nocturno cambiando su frecuencia a 1020 KCS.
Con la publicidad algunas cosas fueron cambiando, hubo menos música clásica y los programas culturales eran casi todos a la noche, o sea toda una serie de cambios obligados por la necesidad de vender, pero siempre manteniendo ciertas líneas de conducta. Esas eran las ideas de Bonaparte, encontrar un equilibrio entre la programación y la necesidad de autofinanciación.
A lo largo de este proceso, salvando, desde luego, los períodos “de facto” o de intervenciones a la Universidad, LT 10 ha ido ocupando un espacio social en creciente expansión.
Cómo ha ocupado ese espacio, de qué manera ha adecuado sus fines y objetivos originales a la época actual, en qué sentido conserva su perfil de radio universitaria sin dejar de adecuarse a las formas y lenguajes de la radio de hoy, son cuestiones que vale la pena abordar, por lo menos en un intento de aproximación.
Desde la recuperación de la democracia LT 10 ha llegado a ocupar un espacio de rango regional en creciente expansión. Su cobertura abarca seis provincias del noreste argentino, adquiriendo especial importancia desde la puesta en marcha del Mercosur.
Con la reinstalación del estado de derecho la emisora incluyó y mantiene desde entonces el denominado “periodismo de opinión”, contando para eso con columnistas y comentaristas que analizan críticamente el campo informativo, en un marco de libertad responsable y pluralismo político-ideológico. Este rasgo ha acentuado la particularidad de estilo de la radio y consolidado un perfil propio.
Hay radios que se escuchan más y radios que se escuchan menos. Esto es un hecho. LT 10 Radio Universidad aceptó durante mucho tiempo ser “una radio que se escucha menos”. Es decir, una radio para oyentes “selectivos”. Sin embargo, está bien claro que los fines para los cuales fue creada implicaban más bien lo contrario. El desafío fue siempre -desde el principio- hacer una radio de nivel universitario para muchos oyentes. Con el tiempo, el nivel universitario se fue convirtiendo en una óptica universitaria sobre todo el universo informativo y comunicacional, mientras que el nivel de audiencia -con ascensos y descensos- se mantenía en un promedio que podríamos llamar histórico.
Pero desde fines de 1983 y particularmente en los últimos años es indudable que el nivel de audiencia ha aumentado.
El hecho de que para los oyentes, invariablemente, la radio sea “Radio Universidad”, está significando que ése es precisamente el modo en el que la emisora se ha instalado en la sociedad y a través de esa experiencia es que ha crecido hasta constituirse en una opción realmente competitiva.
LA TELEVISION EN SANTA FE
1962: LLEGA LA TELEVISION A SANTA FE Y PARANA
Fue un 29 de Marzo de 1962, cuando en forma oficial e ininterrumpida se comenzó a recibir la imagen de Canal 7 Buenos Aires, a través de la repetidora de Santa Fe, primera en todo el interior del país.
La televisión que apareció en 1936 en Estados Unidos, que se inauguró en Buenos Aires, con Canal 7 en 1951, llegaba después de mucho esfuerzo en 1962 a Santa Fe.
Parece hasta casi un cuento contarlo hoy, con tantos adelantos tecnológicos, que en 1961 se formó la comisión Pro-TV Santa Fe, cuyo presidente era Pedro Cogliano, un comerciante de Santa Fe; y su similar, comisión Pro-TV Paraná, con el odontólogo Isaak Habib al frente.
Nos cuenta el Sr. Fortunato Bongiorno, quien desde 1960 ha estado ligado a Canal 7 de Buenos Aires desde la repetidora de Santa Fe, cumpliendo hoy una tarea regional de gran importancia, que las gestiones se hicieron en Presidencia de la Nación, ante la Cámara Comercial de Artículos del Hogar y con las altas autoridades de Canal 7.
Mediante un bono contribución de $ 5, que se puso a la venta (el cual se mantuvo por mucho tiempo) se solventó la compra de los elementos más necesarios, una torre de 15 metros que sumado al edificio de San Martín 2849, donde funcionaba Entel (Empresa Telefónica de Comunicaciones) se llegaba a los 48 metros que, junto al equipo de 5 vattios, prestado por una fábrica militar, permitió cubrir un radio de 2 kilómetros a la redonda.
Posteriormente todo fue muy vertiginoso, la gente colaboraba con el bono contribución y la avidez por ver televisión llevó a que, en pocos meses se instalara un equipo “Deneb” de 50 vattios y se elevara la antena hasta los 70 metros, lo que permitía que la imagen llegara a 40/50 kilómetros a la redonda.
De cualquier manera, por el costo del segundo que Entel cobraba para que la señal llegara desde Buenos Aires a través del cable coaxil, la transmisión se reducía diariamente a 4 horas, de 19 a 23.
Dos datos finales que nos brindó el Sr. Bongiorno: en 1961, cuando se hicieron las primeras pruebas, la señal de video llegaba a Santa Fe por una frecuencia (Canal 7) y la de audio por otra; por lo que debían tener dos televisores, así ocurría que se instalaba en “Casa Testi” (Hipólito Irigoyen esquina Rivadavia) un televisor en la vidriera y otro con parlante exterior para que la gente que se aglomeraba pudiera ver y escuchar televisión.
13 DE MAYO DE 1966. NACE LA TELEVISION DE SANTA FE
COMIENZA A TRANSMITIR CANAL 13 SANTA FE LA VERA CRUZ.
Comenzó como operador en LT 9 en 1960, luego técnico de turno en 1965 en Canal 13, y hoy, en 1998, es un gerente técnico: Eugenio Neyra nos aporta todos los datos para saber cómo nació la televisión de Santa Fe.

Don Marcos Bobbio, fundador de Canal 13, y el “Garaycito”, que identificó al canal del `66 al `80 y en los últimos años con acierto, ha sido recuperado para ciertas ocasiones.
En junio de 1960, el Poder Ejecutivo faculta a la Secretaría de Comunicaciones para llamar a concurso para la instalación de dos canales en Córdoba, dos en Mar del Plata, dos en Rosario y uno en Santa Fe. En esa oportunidad se define que ante la proximidad de Santa Fe y Rosario, en ésta se utilizaría la banda baja del 2 al 6, correspondiendo las frecuencias 3 y 5; y para Santa Fe la banda alta del 7 al 13.

Construcción del actual edificio en Bv. Gálvez 840.
Como el 7 era ocupado por Canal 7 de Buenos Aires que estaba por instalar una repetidora en Santa Fe, se decidió, para evitar cualquier superposición, elegir la frecuencia mayor, en este caso la 13; de allí que se denomina Canal 13.
El 24 de abril de 1964 se le concede a Televisora Santafesina S.A. la licencia para la explotación de un canal en nuestra ciudad. Esa sociedad anónima presidida por Don Marcos Bobbio estaba constituida, entre otros, por Aquiles Allevi, Rómulo Savio, Dr. Angel Mohalu, Valentín Castellví, Dr. Antonio Tiscornia, Emilio José Marconetti, Raúl Borlle, Miguel Allevi y Lorenzo Fortunato de la Torre.
El plazo para poner la señal al aire vencía a los 21 meses, el 31 de enero de 1966, es por eso que las obras civiles se iniciaron aceleradamente a fines de 1965, una vez logrados los recursos económicos para la obras del edificio y la compra del equipamiento técnico.
En enero de 1966 se comienza a construir la planta transmisora de Recreo, donde se ubicó la torre, primero de 70 metros, para poder emitir antes del 31 de ese mes y luego elevarla a 200 metros para la inauguración el 13 de marzo.
La pregunta de por qué en Recreo, tiene su respuesta en que Canal 13 debía lograr su mayor propagación hacia el norte, pues al sur de la provincia ya contaba Rosario con dos canales.
Así fue que alrededor del 10 de enero llegaron desde Inglaterra los equipos Marconi que fueron comprados en un paquete conjunto con la gente de Canal 10 de Mar del Plata. Se eligieron los “Marconi” ya que en televisión blanco y negro eran los de mayor calidad y fue a Inglaterra debido a que éstos tenían la base técnica “PAL”, la cual había elegido nuestro país y que se mantiene actualmente. En ese sentido, EE.UU. trabajaba con la base NTSC.

EL DÍA DE LA PRIMERA IMAGEN GENERADA EN SANTA FE.
El 31 de enero del 1966 con un enorme esfuerzo se pudo emitir la primera señal en prueba, trasladando un generador de sincronismo, un grabador de audio y una pequeña cámara Vilcom que mostró una señal identificatoria durante 4 horas y se escuchaba un texto grabado en LT 9 por uno de sus locutores, el prof. Enrique Muttis, quien fue intendente de Santa Fe en 1990. La prueba fue un éxito y entonces el 13 de marzo estaba al alcance de las manos.

En esos 40 días se ubicaron los equipos Marconi que habían sido guardados en el Regimiento 12 de Infantería, y se hizo un concurso para elegir una mascota, que en ese momento era la manera que se utilizaba para identificar un canal. En Buenos Aires, Canal 13 tenía el telepibe; Teleonce, un leoncito; Canal 12 de Córdoba, un changuito; y Canal 13, a través de quien luego sería su escenógrafo durante años, Tito Díaz, eligió el Garaycito, un simpático muñeco que además servía de homenaje a Juan de Garay. Esta mascota se utilizó hasta 1979.

Desde fin de febrero al viernes 11 de marzo se ponía una placa identificatoria y se proyectaba un ciclo de películas de cine argentino, todas las noches a las 21 hs. Diariamente se probaba la señal para lograr la mejor emisión.

El domingo 13 a las 20 hs. se produjo la gran fiesta inaugural. Santa Fe estaba conmocionada, la transmisión comenzó con un programa especial que llegó de Buenos Aires con los mejores cantantes y grupos de ese momento, entre cada corte se pasaban reportajes realizados por Ricardo Ruiz, donde las personalidades de nuestra ciudad saludaban a Canal 13. El sueño de Don Marcos Bobbio estaba cumplido, pero aún faltaba la transmisión normal con pausas publicitarias, progra-mas locales en vivo y todo lo que es un canal.

Al día siguiente co-menzaron las transmisiones en forma oficial, no había mucho, se había llegado con lo justo, una cámara, las otras dos Marconi más grandes estuvieron listas 30 días después, el control central, un proyector de telecine, una máquina de video-tape, la sala del locutor y los programas comprados a Proartel, Canal 13 de Buenos Aires, que en ese momento tenía la mejor programación. Ese lunes 14 de marzo la transmisión comenzó a las 16 hs. con “Enciclopedia en TV” y a las 20, el primer programa en vivo, “Notitrece” el noticiero conducido por el Prof. Enrique Muttis, a las 20.30, el otro programa en vivo “Estadio 13”, con Raúl Usínger y Heriberto Osuna, con todo el deporte.

En la locución leían publicidad en vivo, ya que todas eran placas publicitarias, Celia Gatti y Billy Mazzola.

Al mes la transmisiones pasaron a iniciarse a las 14 hs., y dos meses más tarde a las 10 de la mañana. La programación de Buenos Aires llegaba con una semana de atraso, hasta que a partir de 1968, el cable coaxil comenzó a traer los programas en directo desde Capital Federal.

Pero las sorpresas seguían para los santafesinos, y un año más tarde, al mismo tiempo que se inauguraba la Estación terrena Balcarce, se producía la primera transmisión Vía Satélite, con la llegada del hombre a la luna, el 20 de julio de 1969.
Muchos años más adelante, las primeras pruebas de barra color en enero de 1980, los primeros programas en colores que se emitieron en febrero, marzo y abril entre las 2 y las 4 de la mañana, en señal de prueba.
Hasta que el 25 de mayo de 1980, junto con ATC y la transmisión de los actos oficiales por la Revolución de Mayo, comenzaron las transmisiones color en forma ininterrumpida.
LA ANÉCDOTA:
Dejamos para el final la aparición del camión de exteriores en marzo de 1967, y la primera transmisión desde exteriores, con el casamiento de Néstor Fabián y Violeta Rivas, el 16 de marzo del ‘67 desde la Basílica de Guadalupe.
En ese momento existía un programa de gran audiencia que iba los sábados de 14 a 20 hs. con la conducción de Nicolás “Pipo” Mancera. Era “Sábados Circulares” y fue éste programa el que decidió, a través de Canal 13 de Santa Fe, transmitir para todo el país el casamiento de dos de los más populares cantantes de esos años.
Pero toda primera vez tiene su anécdota, y ese día apenas concluida la ceremonia que convocó más de 5.000 santafesinos en los alrededores de la Basílica, Pipo y Eugenio Neyra, como técnico del Canal 13, salieron raudamente en un Fiat 600 con los dos rollos de video-tape hacia Canal 13, pero algo había ocurrido: el audio no se grabó, un conector del cable de audio jugó una mala pasada en la pachera del control central y “Pipo”, con todo su profesionalismo, desde la cabina de locutores debió doblarse a sí mismo. Así fue que, mientras se emitía para Santa Fe la ceremonia, él repetía con una memoria prodigiosa todo lo que hacía dos horas había narrado.


1967 – Casamiento de Néstor Fabián y Violeta Rivas, en la Basílica de Guadalupe, primera transmisión desde exteriores de Canal 13.

HOLA SHOW, programa para la juventud y la familia, que inició la televisión local en vivo a la mañana. Conducía Carlos Mario Peisojovich. En la foto, de izq. a der.: Lucho Cattania, Cristina Buchara, el “Peiso” y Duilia Ciuffo.

