Ing. Marcial Candioti.

ING. MARCIAL CANDIOTI

El ing. Marcial Rafael Candioti fue el inspirador y propulsor de la construcción del puente colgante, el cual fuera bautizado con su nombre. Marcial Candioti nació en Santa Fe el 24 de octubre de 1865 y falleció en Buenos Aires el 2 de septiembre de 1928, a los 63 años. Tuvo una vida, tanto pública como privada, muy intensa, que comienza a los 18 años como adherente a la Sociedad Científica Argentina. A partir de allí su actividad se desarrolla en todos los campos: profesor, catedrático, miembro de diversas comisiones de estudio, funcionario público, convencional, legislador, candidato a gobernador de la provincia. Su paso por la presidencia de Obras Sanitarias de la Nación, legó a nuestra ciudad el puente que fue, y seguirá siendo, orgullo de los santafesinos. En 1922, cuando era administrador de Obras Sanitarias de la Nación, toma la decisión de realizar una obra que perdurara en el tiempo y cumpliera las funciones de acueducto y uniera las márgenes de la Laguna Setúbal, ideando el Puente Colgante

MANACO

Dionisio Tabares (Manaco) oriundo de la provincia de Entre Ríos, domador, en una caída golpeó su cabeza  quedando un poco trastornado. Sin trabajo llegó a Santa Fe, vestido al puro del campo. Sus únicos elementos eran el equipo de mate y una honda de horqueta; en los ratos libres se dedicaba a hacer bolitas de barro greda que era su arma para cuando los muchachones le gritaban “Manaco panza de agua”. Deambulaba mendigando en casas de familia, y cuando reunía algún dinero su gran placer era comprar velas de cebo para ingerirlas como caramelos. Su prominente abdomen fue comentario de toda índole, comía carne cruda, pajaritos que cazaba y los más exagerados decían que tenía esa gran barriga por haber nacido con un doble engendro.

La leyenda cuenta que Manaco despertó la curiosidad de un conocido profesional del entonces Hospital de Caridad, el Dr. Trucco, que le compró el cuerpo para estudiar su estómago cuando muriese. Pero algunos sostienen que se trató de una broma del profesional que luego fue distorsionada, al correrse la voz de boca en boca.

Lo cierto es que el médico murió y Manaco continuó viviendo, pero nadie sabe cuántos años más ni dónde culminó sus días.

LOS PRIMEROS ABOGADOS SANTAFESINOS

En el año 1808 regresa a su ciudad natal Pedro Aldao, quien había obtenido el título de abogado en la Universidad de Chuquisaca cuatro años antes. Este hecho significó que el Dr. Aldao fuera uno de los primeros juristas de Santa Fe.

Desde el comienzo de la Revolución ocupó cargos en el gobierno santafesino asesorando a sus funcionarios en el conocimiento de las leyes, hasta 1823, año en que falleció siendo aún muy joven.

Entre los destacados juristas de nuestra ciudad, también se encuentra el Dr. Juan Francisco Seguí, quien luego de iniciar su estudios superiores en Charcas y colaborar en las revoluciones de La Paz y Chuquisaca, se dirigió a Buenos Aires a completar sus estudios en la Real Audiencia.

Durante la Revolución de 1810 participó en el Cabildo Abierto del 22 de mayo, para luego regresar a Santa Fe donde lo nombraron diputado provincial al Congreso de Tucumán, pero no puede asistir.

Durante su carrera asistió legalmente a la provincia en la firma de distintos tratados, entre ellos el Tratado del Cuadrilátero de 1822; y fue hombre de confianza del Brigadier Estanislao López.

El Dr. Pascual Diez de Andino, otro destacado hombre de leyes, cursó estudios en el Real Colegio de San Carlos de Buenos Aires, perfeccionándose en Córdoba y Chile, donde recibió, en 1812, el doctorado en cánones y leyes. Participó en distintos gobiernos de la provincia, destacándose por su defensa del federalismo y la autonomía de los pueblos.

Pero en Santa Fe existieron, también,  hombres que no tenían un título de leyes pero ejercían la profesión de abogados debido a sus conocimientos generales y la experiencia de haber actuado en procedimientos legales. Estos hombres contaban con el apoyo de los distintos gobiernos debido a la falta de profesionales, entre ellos se encuentran: el Dr. Pascual Echagüe (gobernador de Entre Ríos y Santa Fe), Pedro Tomás de Larrechea, Manuel Leiva, Urbano de Iriondo, Domingo Cullen, entre otros.

A partir de 1826, debido a la separación del Estado entre poderes Ejecutivo y Judicial y el Reglamento del Poder Judicial en 1833, la abogacía fue encontrando su  orden y organización.

En la Constitución provincial de 1856 se reglamentó la función estableciendo como condición la de ser “letrado”. De esta época se destacan el Dr. Simón de Iriondo, Tomás Islas, Pedro Rueda, Dermidio Luna, Luciano Torrent y Juan del Campillo.

Finalmente en 1860 la carrera se regula definitivamente con la ley sobre el ejercicio de las profesiones de abogado y escribano.

Los estudios de la profesión en nuestra ciudad se inician en 1868, cuando se crea en el Colegio de la Inmaculada la Facultad de Jurisprudencia y la Academia de Práctica Forense. El gobierno crea, en 1871, las llamadas Aulas Mayores; consistía en cuatro años de estudios que tenían como materias obligatorias el Derecho Natural, Derecho Internacional, Derecho Constitucional, Derecho Civil, Derecho Romano, Derecho Criminal, Derecho Mercantil y Economía Política.

En 1890, El Dr. José Gálvez logra ver concretada una de sus máximas aspiraciones, La Universidad de Santa Fe. La lista de abogados en la ciudad crece considerablemente a partir de la creación de la Universidad Nacional del Litoral, en 1919.

ALCIDES GRECA

Alcides Greca nació en San Javier el 13 de febrero de 1889. Realizó sus estudios primarios en aquella localidad, para luego trasladarse a una escuela jesuita en Buenos Aires. Más tarde, cuando se inaugura el Colegio Nacional de Santa Fe, regresa y es uno de los primeros en graduarse como bachiller.

Nuevamente regresa a Buenos Aires, más exactamente a La Plata, para estudiar abogacía y por aquella época escribe sus primeras líneas “Evangelio rebelde”, “Laureles del Pantano”, y “Lágrimas Negras”.  Faltando muy poco para recibirse, abandona  su carrera para ser electo diputado por su departamento.

Fue entonces que decidió hacerse periodista y funda “El Mocoví”, “El Paladín del Norte”, y “La Palabra”. Se desempeñó en distintos cargos políticos, varias veces legislador provincial, dos veces Diputado Nacional, e incluso formó parte del cuerpo de Constituyentes de 1921. También se desempeñó como profesor universitario y representante del municipio en Congresos Internacionales.

Entre sus novelas más destacadas podemos nombrar “Viento Norte”, “La Pampa Gringa”, “Cuentos del Comité”, etc.

Uno de sus mayores logros fué la realización del film “El último Malón”. La película es un documento donde se muestra el alzamiento mocoví de abril de 1904, fruto de la persecución al aborigen desde la Ley de Territorios de 1884.

En su presentación en la ciudad de Santa Fe, el propio Greca contó peripecias de la filmación y agregó la anécdota del paseo por calle Florida acompañados por un mocoví con el atuendo aborigen anunciando el estreno en Buenos Aires.

Alcides Greca falleció en la ciudad de Rosario el 16 de Abril de 1956.

Dra. ANGELA C. ROMERA VERA.

La Dra. Angela Romera Vera nació el 11 de marzo de 1912 y a los cuatro años es llevada a España por circunstancias familiares. En aquel país cursa sus estudios, egresando como Licenciada en Derecho de la Universidad Central de Madrid, con matrícula de honor. Fue discípula de Unamuno, Posada, Giménez de Asúa, Ortega y Zubiri.

En 1936, ya de vuelta en Argentina, se radica definitivamente en Santa Fe, revalidando su título de abogada y doctorándose en la Universidad con su tesis “Estado y Derecho”.

Fue  una ferviente participante en la Unión Argentina de Mujeres que estaba presidida por Victoria Ocampo. Fundó la agrupación de Mujeres Radicales y fue pionera en la actividad político-partidaria femenina. Ocupó el cargo de Vicepresidenta de la Unión Cívica Radical Intransigente.

Bajo el gobierno de Frondizi, en 1958, se desempeñó como Embajadora Extraordinaria y Plenipotenciaria, siendo la primera mujer que logra ese cargo como jefe de misión permanente.

Fue directora del Instituto de Investigaciones Sociales sobresaliendo su tarea de extensión universitaria, y entre los años ‘55 al ‘73 ocupó la titularidad como profesora de Filosofía del Derecho y de Sociología en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales.

En 1956, crea el Instituto de Cinematografía, que estuviera dirigido por Fernando Birri.

Entre las publicaciones de carácter jurídico pueden citarse “La experiencia jurídica del hombre moderno”, “Los menores antisociales”, “Axiología jurídica y filosofía de los valores”. Quedaron sin publicar ensayos filosóficos, cuentos y una novela.      También  tradujo del inglés y francés libros de Dewey, Mortimer Adler, Gurvitch, Dumas, entre otros.

Al momento de su fallecimiento, el 4 de julio de 1990, dona su campo en el departamento San Justo, a las familias que trabajaban en él.

En la actualidad, el salón de Actos de la Secretaría de Extensión Universitaria lleva su nombre, al haberse firmado la resolución rectoral N° 288 a cargo del Arq. Hugo Storero.

ESCRITORAS SANTAFESINAS

EMMA DE LA BARRA

Nacida en Rosario en 1861, hija del político Federico de la Barra y Emilia González Funes. Radicada en Buenos Aires se dedicó a la música y a la pintura, destacándose en la literatura. Sus novelas (escritas bajo el seudónimo de “César Duayen”) se convirtieron en best-sellers de aquella época. En 1905 se publica su primera novela “Stella” traducida a varios idiomas; otras de sus obras fueron: “Mecha Iturbe” (con una primer tirada de 6.000 ejemplares),“Eleonora” y muchos libros más, algunos llevados a la pantalla.

CARLOTA GARRIDO DE LA PEÑA

Nacida el 2 de agosto de 1870, radicada desde muy joven en Coronda, realizó una gran labor en la Escuela Normal de maestros rurales de esa ciudad. En 1902 fundó junto con Carolina Freyre de James “La revista Argentina”, sus poemas o sus ensayos aparecen en revistas como: “Blanco y azul”, “Azul y Blanco”, “Vida Santafesina”, “Vida Intelectual” y otras publicaciones de las primeras décadas de este siglo. Entre sus obras se destacan: “Corazón argentino”, “Una pasión”, “Entre nosotras”, “Hojas dispersas”, “Luz en el sendero”, “Como vence el amor”, “La última esperanza”, “Entre dos amores”(premiada en Buenos Aires y editada en Valencia, España), “Mar sin riberas” y “El milagro del castillo encantado”; en 1950 publicó su último libro, “Surcando el sendero”. Muere en Coronda el 19 de julio de 1958.

N° 7 de la Revista Troqueles, del 15 de Diciembre de 1923.
Gentileza Mario Bruno y María de los Angeles Moyano.

ALFONSINA STORNI

Nació en Suiza, Sala Capriasca, Tessino, el 29 de Mayo de 1892. Contando con sólo 9 años se instala en Rosario donde transcurre toda su infancia. En su juventud se traslada a Coronda para proseguir con sus estudios, tomando contacto allí con María Margarita Gervasoni y con Carlota Garrido de la Peña, quienes la apoyan e instan a desarrollar su vocación poética. Entre sus obras se destacan: “La inquietud del rosal”, “El dulce daño”, “Languidez”, “Ocre”,  “Mundo de siete pozos” hasta rematar en “Mascarilla y trébol”; toda la poesía de Alfonsina es un permanente canto al amor, a la vida, envuelto en la fina nostalgia de su espíritu atormentado. El 25 de Octubre de 1938 terminó trágicamente su vida.

ANGELA GENEYRO

Nacida en Santa Fe, el 17 de Marzo de 1877. Obtiene el título de maestra en la Escuela Normal de Niñas de Santa Fe en 1898. En 1901 publica un libro titulado “Frases pálidas”.

Poeta de honda sensibilidad, realiza su obra bajo la influencia del postromanticismo. En nuestro medio publica sus poesías en “Excelsior”, revista literaria fundada en 1900 y en “Blanco y Azul” de 1901. El 13 de noviembre de 1905 moría a la edad de 28 años.

MERCEDES PUJATO CRESPO

Nacida a fines del siglo pasado y descendiente de una vieja y tradicional familia santafesina, admiradora de Darío y más tarde de Lugones. Sus poesías generalmente de profunda inspiración patriótica, figuran en casi todas las revistas literarias de su época.

Su primer libro fue “Albores”(1903), siguiéndole “Flores del campo”, “Días de sol”, un drama titulado “Liropeya”. También dejó un trabajo histórico sobre la provincia de Santa Fe. Su primer poema “Judhit” fue publicado en 1899 en el Correo Argentino de Buenos Aires. Falleció en Santa Fe el 19 de Octubre de 1954.

OTRAS ESCRITORAS

María Elida Moyano, autora de un importantísimo libro de poemas “Arpegios del Alma”, impreso en los talleres de “Nueva Epoca” en 1919; Margarita Burbec Routin, colaboradora de “Vida Santafesina”; Ana A. de Torralvo, directora de “Vida Santafesina”, en la cual figura Margarita Gervasoni con interesantes artículos de carácter pedagógico. También se pueden mencionar a: Aquilina Vidal de Brus, María Gouviene, María Hurtado y Gil, Estela Maris, Josefa Allende Lezama, María Velasco y Arias y Teresa N. Oberti, por nombrar algunas.

PINTORES SANTAFESINOS

JUAN CINGOLANI

Nace en la aldea San Edigio, comuna de Monte Cassiano, en Macerata, Italia, el 22 de enero de 1859. A los 20 años se recibió de profesor en la Academia de Bellas Artes de Perugia. Gracias a su prestigio llega a ser amigo del Papa León XIII; realiza reparaciones de la pinoteca del Vaticano, en la “Biblioteca del Vaticano”, restauró el “Juicio Final” de Miguel Ángel. En 1909 llega a Santa Fe, su obra comprende personajes de diversas órdenes religiosas, frescos, imágenes y santos. Entre las obras realizadas en Santa Fe se destacan: los frescos de la bóveda de la Iglesia del Carmen (junto a Francisco Marinaro); los frescos de los camarines de la Iglesia de Guadalupe y los medallones del templo de Santo Domingo y San Francisco. Falleció en nuestra ciudad el 23 de Abril de 1932.

JOSE MARIA D’ANNUNZIO

Italiano, nacido el 6 de marzo de 1864 en Poggio Imperiale, provincia de Foggia. Su vocación por el dibujo fue dirigida por el Profesor Lattangio. Llegó a Buenos Aires en 1887 para luego radicarse en Santa Fe. Trabaja en cartografía y planos y se dedica al dibujo y la pintura. En 1891 fundó la Primera Academia de Dibujo y Pintura del Estado.

El Museo de Bellas Artes “Rosa Galisteo de Rodríguez” cuenta en su colección con las obras: ‘Autorretrato”, “Valle Dorado”, “Curupíes” y “Día Gris”. En el Museo Municipal de Artes Visuales se guarda “Puesta de sol”. Muere el 11 de septiembre de 1950.

JOSE MARIA REINARES

Nació en la provincia de La Rioja, España, en 1876 y falleció en Santa Fe en 1925. Fue educado por su hermana que era maestra, luego pasa a la Escuela Normal Nacional de maestros. Su vocación por el dibujo hace que abandone la escuela para ingresar al taller de pintura de Josefa Díaz y Clucellas y más tarde al de grabado y litografía de Emilio Digier. Se perfecciona en Buenos Aires, donde también realizó cursos de dibujo y pintura en la Academia Nacional de Bellas Artes. Regresa a Santa Fe en 1908 e instala la Academia de Bellas Artes “Reinares”. Entre sus egresados se cuentan: Enrique Estrada Bello, Baldomero Banús, Héctor Lauría, Severo Vicerich, José García, Benito Bello y Antonio Colón.

SALVADOR CABEDO

Nacido en Valencia, España, en 1869, falleció en Santa Fe en 1949. Egresó de la Academia de Bellas Artes de Valencia. Llegó a Santa Fe en 1911, fue docente en los Colegios de la Inmaculada y Nacional, también formó parte del cuerpo de profesores de la academia Reinares. Por su labor en España fue distinguido con el título de Caballero de la Orden de Alfonso XII y el de Comendador de la Orden de Isabel la Católica.

FRANCISCO MARINARO

Nacido en 1882 en Matera, Italia, fallece en Santa Fe en 1970. Estudió en Italia pintura y decoración con Francisco D’Antona y Onofrio Giaculli y perfeccionamiento artístico con Rocco Carlucci.

Llega al país en 1908; trabaja como profesor en la academia de D’Annunzio, en el Colegio de la Inmaculada y en la Sociedad de Unione e Benevolenza. Entre sus obras se destacan los trabajos de decoración y restauración en iglesias, monumentos y residencias privadas. La bóveda de la nave central y paredes de la iglesia del Carmen, la cúpula de la iglesia de Santo Domingo, la decoración de la capilla y el altar del Colegio Jobson, el ábside del templo de las Hnas. Adoratrices y la decoración mural de la iglesia del Huerto.

Acuarela del F. Puccinelli. Convento de San Francisco

HECTOR FACINO

Fue el primer pintor afincado en la capital de la provincia. Italiano, nacido en Parma en 1829; se radicó en nuestra ciudad en 1868, hasta 1890, año de su muerte. Maestro de la única academia de Dibujo y Pintura del Colegio de los Jesuitas. Ocupó cargos de importancia en la administración provincial. Su obra: en la Iglesia del Carmen se guardan dos grandes cuadros: “Un naufragio” y una escena del “Purgatorio”. El Museo Histórico Provincial posee dos pinturas, una que representa al Brigadier Gral. E. López y la otra es un retrato del Gral. Simón Bolívar.

Facino fue maestro de Josefa Díaz y Clucellas, Ana Galán de Coll y de Rosario Pujato Crespo.

LUDOVICO PAGANINI

Paganini nació en Italia en 1884, y de muy pequeño llegó a nuestra ciudad. Aprendió dibujo  con los profesores Stafolani y Cingolani, y decoración con Marinaro, en la escuela nocturna de la “Unione e Benevolenza”.
También pasó por las academias de D’Annunzio y Reinares, ocupándose de trabajos de carácter comercial y a la industria. Así fue que instaló la primera fábrica de espejos de Santa Fe, en 1922

Cuadro de texto:   “Inundación”- Oleo de Ludovico Paganini.

Luego de un viaje por Europa, donde aprendió nuevas técnicas de pintura, a su regreso expone junto a su amigo Puccinelli en Buenos Aires, más tarde en nuestra ciudad y Rosario, donde logró recolectar varios premios y diplomas. Fundó la Casa del Artista y logró la participación de los artistas en los jurados de selección y primos.(ver foto pág. anterior).

ENRIQUE ESTRADA BELLO

Santafesino de nacimiento, se recibió de profesor de dibujo en la academia de José Reinares, donde se aplicaban los programas de la Academia de Bellas Artes de Buenos Aires

Trabajó como ilustrador y comentarista gráfico en el diario “Nueva Epoca”, y al volcarse hacia el color, comenzó a pintar libremente. Por sus pinturas logró los premios más importantes: Primer premio figura y primer premio composición en los salones anuales de la Sociedad de Artistas Plásticos de Santa Fe; medalla de oro en la Exposición del Litoral; medalla de oro de la Junta de Estudios Históricos de Santa Fe con el retrato al Brigadier General Estanislao López, obra que adquirió la Legislatura de la Provincia para el salón de su presidencia. La lista de distinciones parece interminable, al igual que las instituciones culturales y gubernamentales que cuentan con alguna obra de Estrada Bello.

También se desempeñó como profesor de dibujo, volcando todo su conocimiento y experiencia, en el Colegio Nacional “Simón de Iriondo” y en la Escuela Normal “San Martín”.

“La muchacha de la alfombra” – Oleo de Enrique Estrada Bello.
Cuadro de texto: César López Claro

CESAR LOPEZ CLARO

El artista César López Claro nació en Azul, provincia de Buenos Aires, el 5 de julio de 1912. Luego de estudiar en la Escuela Nacional de Bellas Artes decide radicarse en la ciudad de Santa Fe, en 1942.

López Claro ha expuesto sus obras en museos del extranjero y de nuestro país, incluso algunos conservan sus trabajos que perdurarán en el tiempo. También ha sabido formar a numerosos discípulos en las artes plásticas.

Durante una exposición de Artistas del Interior, en Capital Federal, la directora de la Escuela de Artes Visuales de Santa Fe le comenta el proyecto de realizar una serie de muestras de ex profesores para acercar a los alumnos a sus maestros y su obra. López Claro aceptó gustoso.

De vuelta en Santa Fe se ofrece para realizar un mural para decorar el Aula Magna, es así que de inmediato comienza a pintar 10 murales de 3,20 x 3 metros. Dicha aula fue inaugurada el 24 de mayo de 1986.

El trabajo de César López Claro queda incorporado al patrimonio cultural santafesino, como una obra de singular importancia, ya que en el país no son muchos los ejemplos que pueden darse en el campo mural integrado arquitectónicamente.

Luego de muchos años de intensa labor en el terreno artístico, decidió realizar una especie de retiro voluntario y se fue a Buenos Aires, pero no duró mucho.

Ha realizado más de 300 muestras individuales y participó en innumerables exposiciones colectivas. Representó a nuestro país con sus obras en los siguientes países: Estados Unidos, Chile, Perú, Ecuador, Paraguay, Bolivia, Brasil, Uruguay, España, Portugal, Italia, Francia, Suiza, Austria, Alemania, Bélgica, Holanda, Inglaterra, Suecia, Dinamarca, Unión Soviética y Finlandia, y participó en la I Hispanoamericana de Cuba en 1954 y en la IV Bienal de Arte en San Pablo, Brasil, en 1957; contando, además, con numerosos premios.

En 1991, es nombrado “Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Santa Fe”, y en 1994 pinta un panel de 5 x 4 metros destinado al Paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral, donde se reunió la Asamblea Nacional Constituyente reformadora de la Carta Magna.

RICARDO SUPISICHE

Ricardo Supisiche nació en Santa Fe en 1912, estudió en la Academia de Reinares, en la Escuela Municipal de Arte y en la Escuela Profesional Leandro N. Alem. Ejerció la docencia en la Escuela Provincial de Artes Visuales “Juan Mantovani”.

Compartió la segunda generación de pintores santafesinos con Mario Gargatagli, César Fernández Navarro, César López Claro y Matías Molinas, entre otros. Falleció el 8 de noviembre de 1992.

LINA BECK BERNARD

Nació en 1824 en Bitscwiller, Alsacia, cerca de Than en el alto Rhin, y murió en Lausana, Suiza, a los 64 años, el 27 de setiembre de 1888.

"El árbol" – Ricardo Supisiche

Llegó a Santa Fe en 1857, junto a su marido y sus 4 hijas en el primer contingente de familias traídas por Aaron Castellanos para fundar Esperanza. El matrimonio fijó domicilio en Santa Fe, en calle San Gerónimo frente a la Plaza de Mayo.

Mientras su esposo, Carlos Beck, daba nacimiento en 1858 a San Carlos, o presidía el Club del Orden, Doña Lina participaba de actividades filantrópicas con otras damas del Club del Orden. También se dedicó a observar a la sociedad santafesina, el ambiente local, medio social, el paisaje y las costumbres, anotando todo para luego plasmarlo en el capítulo “Santa Fe desde la azotea” en uno de sus libros.

En 1861, tras la muerte de sus 2 hijas más pequeñas, decide dejar Santa Fe y regresar a Lausana con sus otras 2 hijas.

Cuadro de texto: Lina Beck Bernard

En Suiza, terminó su libro de viaje y de impresiones de la ciudad de Santa Fe y lo publica en París en 1864 con el título de “Le río Paraná. Cinq annés de de sejour dans la Republique Argentine, 1857-1862”. Esta obra fue traducida y publicada en nuestro país por el Dr. José Luis Busaniche en 1935. También escribió una novela titulada “La Estancia Santa Rosa” que tiene como escenario a la estancia del Coronel José Rodríguez, cerca de Santa Clara de Buena Vista. Otras fueron “Telma” y “Fray Antonio” donde se revivían escenas y episodios del río Paraná y recuerdos de la sociedad santafesina.

Como no se conoce otra mujer que hasta entonces hubiera escrito en Santa Fe y sobre Santa Fe, aún siendo extranjera se la considera la primera escritora santafesina.

“COTITA”  BARLETTA

María del Huerto  Barletta (“Cotita”) se asomó a los micrófonos santafesinos a mediados de la década del 40. Algunos la definieron como una transgresora, otros copiaron su estilo; porque “Cotita” era la imagen de una mujer inteligente y emprendedora.

Así fue como desarrolló “El carnet social de Cotita”, “Vida social de una mujer”, “Amigos de la butaca”, “Ese viejo Santa Fe”, “Historias de mujeres” y “Reportajes callejeros”. Luego, su camino siguió en la ciudad de Rosario, donde repartía su tiempo entre la Facultad de Filosofía y Letras, el Consulado General de Francia y Radio Nacional

De allí el impulso de su espíritu hizo que llegara a Francia, donde afirmó su vocación periodística; participó en varios Congresos como delegada argentina. Luego de trabajar varios años en la radio y televisión francesa; y al mismo tiempo realizaba colaboraciones para El Litoral, de Santa Fe; El Diario, de Paraná; Novedades, de México; El Nacional, de Colombia; o La Capital, de Rosario.

En 1965 regresó a Santa Fe y dijo “Como dice la vieja canción francesa, se pueden tener dos países. Yo tengo a Santa Fe y a París. He aprendido mucho en Francia y ahora ha llegado la hora de volcar mi experiencia en Santa Fe. Con los míos, con mi ciudad”.

“Cotita” siempre fue dueña de una simpatía personal incuestionable, con permanentes iniciativas y una enorme capacidad de trabajo. María del Huerto Barletta marcó un modo muy bien definido de hacer radio.

DE ANTIGUAS BOTICAS

En 1887 se realiza un censo en la ciudad de Santa Fe, donde consta la existencia de tres farmacias. Al organizarse la Guardia Nacional, por solicitud del Ministerio de Guerra de la Nación, el gobernador de Santa Fe, Luciano Leiva, redacta un decreto creando el cuerpo médico de la Guardia Nacional. Fueron nombrados como Farmacéuticos de Brigada: Don Manuel Irigoyen, Pedro Aldao, Dalmiro Videla y José Vicente Parpal; y como Farmacéuticos de Regimiento: a Don Marcos López, Leónidas Rapacioli, Ignacio Carranza y Miguel Irigoyen. La mayoría de estos hombres actuó en forma profesional durante varias décadas en nuestra ciudad.

FARMACEUTICOS
 

José Beleno: De muy pequeño se radica en nuestra ciudad y estudia en el Colegio de la Inmaculada . En 1896 obtiene el título de farmacéutico en la Universidad de Buenos Aires, y al comenzar el siglo le compra a Don Vicente Parpal su farmacia de calle La Rioja 172, entre 25 de Mayo y San Martín, pero años más tarde la traslada a calle San Martín entre La Rioja y Tucumán.
Dentro de sus mayores logros se encuentra el ser uno de los fundadores de la Facultad de Farmacia dependiente de la Universidad de Santa Fe, ejerciendo la cátedra de Farmacognosia y siendo decano en 1917. Una vez creada la Universidad Nacional del Litoral, Beleno dicta su cátedra en la ciudad de Rosario ya que la Facultad de Santa Fe pasa a depender de la Facultad de Medicina. Fallece el 17 de julio de 1940.

José Vicente Parpal:se graduó en la Universidad  de Córdoba el 23 de Octubre de 1887 y ejerció durante muchos años su profesión. Estuvo al frente de la cátedra de Química en la Escuela Normal Nacional de Maestros, y su primera farmacia funcionó en calle La Rioja 172. Luego se trasladó a San Gerónimo y Córdoba (hoy, Juan de Garay). En un caso poco común, con el transcurso de los años fue mudando el local y sucesivamente ocupó las cuatro esquinas de la ochava. Su gran labor fue la creación de la Facultad de Farmacia, de la Universidad de Santa Fe, en 1910. Fue su primer decano, y dictó clases de Química Inorgánica.

Pedro José Benet: farmacéutico y perito químico, miembro fundador del Instituto Bromatológico y del Departamento Químico de nuestra provincia; miembro correspondiente de la Academia Argentina de Farmacia y Bioquímica; consejero y fundador de la Confederación Farmacéutica Argentina; catedrático, y decano de los farmacéuticos santafesinos. Estuvo ligado a la historia de la viejas “boticas” de nuestra ciudad. Su farmacia funcionó por años en la calle 3 de Febrero y 9 de Julio, en pleno barrio Sur.

POR JOSE RAFAEL  LOPEZ ROSAS

PEDRO BUSTAMANTE “EL TAMBOR DE TACUARI”

Pedro Bustamante nació en 1793 en  Soledad, una pequeña población del departamento San Cristóbal, donde estaba uno de los más avanzados fortines que defendía a Santa Fe contra los indios: el Fuerte Nuestra Señora de Soledad. Era hijo de  uno de los Blandengues de esa guarnición, y desde pequeño su padre lo adiestró en el rudo servicio de soldado y fue destinado a aprender los toques de tambor.

A los 14 años formó parte del contingente enviado por Santa Fe a Buenos Aires, y combatió por primera vez contra tropas regulares en las invasiones inglesas de 1806 y 1807. Al poco tiempo vuelve a nuestra ciudad prestando servicios en la frontera.

Luego de la Revolución de Mayo, el Gral. Manuel Belgrano pasa por Santa Fe y lo recluta para la expedición al Paraguay. Toma parte de las batallas de Paraguarí y Tacuarí y sigue a sus jefes hasta el cerrito Los Porteños.

Más tarde se incorpora a un Batallón de Buenos Aires y concurre poco tiempo después a las barrancas del Paraná para el primer izamiento de la Bandera Nacional. Además participa en los combates de Tucumán y Salta. Sigue a San Martín en su campaña y luego regresa a Santa Fe para ponerse a las órdenes del Brigadier Estanislao López. Su cargo es el de Sargento de Tambores; y dejó el servicio cuando su cuerpo no pudo soportar el ritmo de trabajo.

Radicado definitivamente en Santa Fe, muere el 1° de Julio de 1883 en la pobreza y olvidado. Sólo diez años antes, el pueblo de la capital provincial le había tributado un emotivo homenaje en la plaza 25 de Mayo. Allí, Bustamante, llorando y casi ciego, tocó “su última diana de la patria vieja”. Sus cenizas descansan en el Cementerio Municipal, donde se levanta, en su honor, un monolito con una placa recordatoria.

Dr. PAULINO LLAMBI CAMPBELL

El Dr. Paulino Llambi Campbell, debido a su fuerte posición social, ingresó al mundo de la política a través del Partido Autonomista Nacional, ocupando el cargo de Senador Provincial cuando triunfó la fórmula Luciano Leiva – Eliseo Videla en 1894.

Entre las obras que se le adjudican, se encuentran:  la construcción del ferrocarril de Villa Guillermina a Villa Ocampo, en el cual se transportaba el tanino producido en las fábricas de La Forestal. Instaló uno de los primeros tranvías de trocha ancha en nuestra ciudad, se trató de la Estación Progreso Santa Fe que estaba ubicada en Boulevard Pellegrini entre San Martín y San Gerónimo; el primer coche circuló en 1888.

En 1905, el Dr. Llambi Campbell donó los terrenos lindantes a su residencia, donde actualmente se levanta la Municipalidad de Santa Fe.

A lo largo de su vida fue fundando varias colonias con el paso del ferrocarril, como por ejemplo: Colins, Llambi Campbell, Fani, Independencia, Fidez, San Pedro, e Ituzaingó. Muchas de estas colonias ya no forman ninguna localidad debido al levantamiento de los ramales ferroviarios.

El 14 de Octubre de 1912 lo sorprende la muerte durante un viaje a Europa, más precisamente en Bruselas.

LOS FOTOGRAFOS

Louis Jacques Mandé Daguerre desarrolló el primer procedimiento fotográfico practicable que en su honor se llamó daguerrotipo y fue dado a conocer por la Academia de Ciencias de París el 15 de agosto de 1839. Pero el primero un tomar una fotografía fue Nicéphore Niépce en 1824 y, ambos asociados, realizaron durante años experimentos para mejorar el revelado.



Flia. Lutsch, fotografiada por Garcilaso. En el retrato, Lutsch ya fallecido
 

Fue el inglés Williams Henry Fox Talbot que inventó un sistema a base de negativo y positivo que permitía la posibilidad de copias en número ilimitado.

En Santa Fe, las primeras fotografías aparecen en 1860 y los pioneros son Tappa y Lutsch. Más tarde vendrían Olivera, Rodríguez, Sarrat,  Garcilazo, Peña; y más cerca a nuestro tiempo Torres, Silvestrini, Valenti, Kessler, Birri, Platini, entre otros.

Pedro Tappa: llega a nuestra ciudad en 1860 y se dedica a plasmar distintos ámbitos de Santa Fe en sus fotografías, como así también acontecimientos y personajes.

Augusto Lutsch: Nació en Alemania 1856 y se instala con su propio estudio en calle Comercio 628 a fines del siglo pasado. Sus trabajos tenían un toque personal que le mereció renombre y varios premios.

Manuel Garcilaso: Nació en Coronda el 11 de diciembre de 1876. Después de la muerte de Lutsch, Garcilaso hereda su estudio y deja para la posteridad trabajos que reflejan la vida cotidiana, acontecimientos sociales y políticos y las primeras fotos coloreadas. Falleció en Santa Fe el 17 de Enero de 1941.

LA FOTOGRAFÍA EN SANTA FE: 1860 – 1960:

FOTÓGRAFOS DESTACADOS

FOTOGRAFO

PERIODO DE ACTUACION

DIRECCION

Pedro Tappa

1860-1890

Comercio 36 – Comercio 28 San Gerónimo 254

Augusto Lutsch

1885-1910

San Gerónimo 186 – Comercio 569 – Comercio 628

Olivera

1889

San Jerónimo 254

Pedro Ferrari

1895

Vera 260 – Humberto 1° 271

Clodomiro Rodríguez

1890-1900

San Gerónimo 538

Martínez y Casa Demont

1895

San Luis 315

Molina Domenech

1895-1900

Corrientes 289 – San Gerónimo 543

Virginio Pozzi

1898-1932

Humberto 1° 284

Marcelino Sarrat

1900-1910

Mendoza 173

Juan Dix

1900

25 de Mayo 361

Vicente Pascual

1900-1945

San Luis 334 y Rivadavia 370

Manuel Garcilaso

1900-1940

Hereda el estudio de Lutsch

Luis Lutsch

1917

Mendoza 179

Silvestrini

1920

25 de Mayo 2784

José Torres

Década/1930

San Martín 2664/86

Carlos González Acha

Década/1940

San Martín 2073

Casa Valenti

1940-1960

San Martín 2113/2020

Pascacio Peña

1940-1960

San Martín 2243

MANUEL GARCILASO

La vida del fotógrafo que siguió los pasos de Augusto Lutsch y Pascacio Peña concluyó.

1908 – Avenida Rivadavia

1908 – Edificio del Ferrocarril Santa Fe, hoy Terminal de Ómnibus, demolido en 1962 

Material cedido por Lilian Romero Garcilaso de David